Cuando hablamos por telefono somos dos personas diferentes que coquetean tras un celular o una linea fija.
Cuando estamos en persona, nos escondemos como un ñandu que tiene miedo.
Porque a veces pienso que me vas a morder.
Porque a veces pienso que te vas a esconder.
La que se esconde de tus ojos y de tu boca soy yo.
Pero no me refugio de tu voz.
Etiquetas: Escritos antes de dormir